Estos son cuestiones útiles que se debe de tomar en cuenta al hacer una redacción:
¿Por qué se debe ser claro?
Porque las ideas confusas, mal dichas, expresadas con palabras o formas inapropiadas, sin orden o un plan establecido, confunden al lector, que se queda sin entender ni comprender nuestro mensaje.
La falta de claridad de un texto puede originarse por:
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El uso de palabras o expresiones imprecisas.
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El empleo de palabras desconocidas por el lector.
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Palabras aplicadas fuera de su significado real.
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Construcción de párrafos imperfectos o dudosos.
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Párrafos muy extensos, complicados, imprecisos u oscuros.
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El uso indebido de los signos de puntuación.
¿Por qué debemos ser breves?
Porque las ideas expresadas en oraciones y párrafos cortos son preferidas en la redacción moderna, porque acortan la comunicación entre el redactor y el lector, y facilitan la comprensión. Una oración o párrafo breve es más fácil de seguir desde el principio hasta el fin. Ofrece, además, menos riesgos gramaticales para el autor.
No es aconsejable escribir sólo con oraciones cortas, porque el estilo resultaría cortado, pobre y monótono, pero tampoco con oraciones largas únicamente, porque resultaría confuso y fatigante. Una buena técnica es combinar ambos tipos de oraciones, en forma equilibrada, pero sobre todo con buen gusto y armonía.
¿Por qué debemos ser naturales?
Porque haciéndolo en forma sencilla, fácil, no forzada, sin incurrir en construcciones o expresiones rebuscadas, lograremos una información y una comunicación acorde que cumpla con sus objetivos.
El estilo recomendado es el natural, pero sin llegar a ser vulgar, grosero o superficial. Esta forma de redactar puede compararse con una conversación formal ante superiores, desconocidos o en una exposición pública. es el mismo estilo en que están escritos los diarios serios y de prestigio. Una de las peores cosas que se puede hacer es pretender ser erudito o académico.